domingo, 10 de mayo de 2009

Brasil conquista el Suramericano Sub-17 al vencer a Argentina por penaltis

Fuente: EFE

La selección de Brasil se adjudicó hoy el campeonato Suramericano Sub'17 tras derrotar a la de Argentina en una ajustada tanda de penaltis, tras ver como los 'albicelestes' remontaron un 2-0 en el tramo final del choque. La suerte de los penaltis fue la encargada de dirimir el trono del fútbol sudamericano sub'17, que en esta ocasión hizo un guiño a los brasileños y castigó cruelmente a los transandinos en el Estadio Tierra de Campeones, en la norteña ciudad chilena de Iquique.

Fue necesario que cada selección ejecutara nueve lanzamientos desde los once metros para poder proclamar a un campeón, en una tanda que los brasileños se llevaron por 6-5. Dentro del tiempo reglamentario, Zezinho (m.3) y Coutinho (m.56) anotaron para la 'canarinha', mientras que Sebastián González en el minuto 65 y Esteban Espíndola, de penalti poco antes del final fueron los goleadores de la 'albiceleste'.

Con los dos elencos ya clasificados para el Mundial de la categoría, que se celebrará en Nigeria entre el 24 de octubre y el 15 de noviembre próximos, el gran clásico del fútbol latinoamericano prometía intensidad y alegría con dos selecciones con buen gusto para el fútbol. Futbolísticamente el encuentro no fue una ninguna maravilla, pero la emoción de la remontada argentina y la épica de la tanda de penaltis constataron que se trataba de la final de una competición internacional.

Con ambos equipos aún acomodándose en el césped del Estadio Tierra de Campeones, Brasil golpeó primero y en el minuto tres se adelantó en el marcador con un tanto de Zezinho, que sacó un disparo lejano sin aparente peligro que se coló en el arco tras rebotar en el poste derecho. El tempranero gol de los brasileños no alteró el guión previsto por Argentina, que a punto estuvo de conseguir el empate con un preciso disparo desde fuera del área de Sebastián González que el cancerbero Luiz Guilherme alcanzó a rechazar a córner.

Brasil, superior físicamente, también generó llegadas con peligro, casi siempre con Coutinho y Wellington como protagonistas, dos arietes con mucha movilidad y hábiles en la conducción del balón. El juego de toque de los finalistas se vio dificultado por estado del césped, pésimo en algunas zonas de la cancha, tras acoger otros dos partidos durante la misma jornada. Tras los chispazos de los primeros minutos la contienda cayó en un intervalo de letargo, con imprecisiones y mucha brega en el centro del campo.

Hasta que los 'albicelestes' se pusieron de nuevo las pilas y encadenaron una serie de buenas combinaciones que pusieron en aprietos los fornidos centrales brasileños. Primero fue el pequeño y correoso Daniel Villalva el que protagonizó una internada por la banda derecha y a los pocos minutos Esteban Orfano tiró un centro que casi encuentra el remate tras un error de los 'canarinhos'. Antes del descanso, Sebastián González puso de nuevo a prueba al arquero brasileño con un lanzamiento de falta raso y ajustado al palo que Luiz Guilherme rechazó por los pelos.

Brasil salió más entonado en la reanudación y una genialidad de Coutinho acercó un poco más a la 'verdeamarilla' hacia su octavo título continental. La joven promesa del Vasco de Gama recibió cerca del límite del área y, sin espacio, conectó una perfecta parábola que eludió los defensas e hizo inútil la estirada del portero Damián Martínez. Cuando el encuentro parecía más favorable para Brasil llegó la reacción de Argentina, que en el minuto 65 acortó diferencias con un gol de Sebastián González, el mejor de los 'albicelestes', tras un mal despeje del portero.

La remontada de Argentina fue una realidad a tres minutos del tiempo reglamentario, cuando los brasileños ya esperaban a que el colegiado pitara el final del choque. Una mano dentro del área de Romario provocó un penalti que el capitán argentino Esteban Espíndola se encargó de transformar ante la locura de los numerosos aficionados transandinos que poblaban las gradas.

En la decisiva tanda de penaltis el protagonismo recayó en los arqueros, que se encargaron de alargar el agónico final. Finalmente, un fallo de Lucas Krupsky y el posterior acierto de Wellington llevó a Brasil hacia su noveno título sudamericano. En el Mundial, estarán acompañados por Uruguay y Colombia, tercero y cuarto respectivamente en el torneo.

1 comentario:

FERNANDO SANCHEZ POSTIGO dijo...

Espero que esta Brasil respeto el tradicional juego de la selección amarilla y no caiga en el error de la defensa a ultranza. Un abrazo